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¡NOMAS NO APRENDE!; Laura Beristain, de alcaldesa incompetente a regidora agitadora.

  • Foto del escritor: Acontecer Riviera Maya
    Acontecer Riviera Maya
  • 1 oct 2021
  • 4 Min. de lectura

-Tras concluir de manera vergonzosa su gestión como edil, Beristain Navarrete se apareció en la Sesión Solemne para asumir como Décima Regidora.

-Desde la Sesión Solemne y toma de protesta, adoptó una actitud desafiante y decidida a generar problemas desde el primer día de la administración de Lilí Campos.

-Su irresponsabilidad como servidora pública llegó al colmo del asunto que el síndico municipal no acudió a la sesión ordinaria para entregar el estado que aguarda la administración 2018-2021.


PLAYA DEL CARMEN, Q.ROO, 1 de octubre.- Laura Beristain Navarrete nomás sigue sin hacerse a la idea que ya no es presidenta municipal de Solidaridad, pues aún cuando ahora decidió asumir como Décima Regidora en el Cabildo encabezado por Lilí Campos Miranda, quiere seguir imponiendo sus ideas a los demás concejales, tal y como exactamente lo hacía cuando fungió como alcaldesa durante tres tortuosos años.

Con todo el descaro que la caracteriza y pese al repudio ciudadano por la desastrosa administración que recién concluyó el pasado miércoles, Laura Beristain asumió como Décima Regidora al presentarse sumamente relajada ante un público que no daba crédito a su cinismo, y aunque parecía que todo iba bien, al final comenzó a mostrar signos de hostilidad y faltas de respeto hacia los demás integrantes del cuerpo edilicio.

Y es que durante la Sesión Solemne y Toma de Protesta, Laura Beristain, quién fue mandada hasta la fila de atrás para quedar lo menos visible ante el público que asistió, no aplaudió en ninguna de las intervenciones hechas tanto en la llegada de los representantes de los Tres Poderes del Estado, como en el discurso oficial de la edil Lilí Campos, por lo que desde ahí ya se comenzaba a vislumbrar un ambiente de hostilidad de su parte.

Pero la cosa no paró ahí, pues minutos antes de iniciar la Sesión Ordinaria para otorgar los nombramientos de los primeros funcionarios del gabinete de Lilí Campos, ella y los regidores Valentina Álvarez Castañeda y Luis Allan Ochoa Medina -todos ellos de Morena-, comenzaron a hablarse entre ellos y en un sitio muy aparte de la multitud que estaba congregada en la Sala de Cabildo “Leona Vicario”.

Las muestras de rebeldía cobraron mayor intensidad cuando en prácticamente todos los puntos del orden del día, los tres regidores morenistas votaron en contra de todas las propuestas hechas por el cuerpo edilicio, por lo que el mensaje era mas que evidente: ellos como representación de Morena buscarán ser un dolor de cabeza tanto para Lilí Campos, como para los demás regidores emanados de los demás partidos políticos.

Pero la gota que derramó el vaso se dio al momento de llegar al punto de la aprobación de la asignación de las comisiones edilicias, por lo que al anunciarse como quedaron distribuidas, Luis Allan Ochoa Medina recriminó el hecho de que no se le haya asignado ninguna presidencia en alguna de las comisiones mencionadas anteriormente y mientras a otros se les asignaron hasta dos presidencias. Incluso hasta “sugirió” a los regidores y a la presidenta que le asignaran la comisión de Desarrollo Urbano y Transporte, así como la de Obras y Servicios Públicos.

Minutos después, la Séptima Regidora Maribel Morales Vejar, puso a consideración del Cabildo que ella le cedería la presidencia de la comisión de Igualdad de Género, propuesta que el rechazo, pues expuso una vez mas sus pretensiones de que el cabildo le asignaran las comisiones anteriormente mencionadas.

Minutos mas tarde, Laura Beristain recriminó que los integrantes del cabildo estén ejecutando un ejercicio de “imponer voluntades sin hacer consensos” y que no hay democracia participativa, aunque después se dijeron “abiertos al diálogo”, por lo que tuvo la ocurrencia de pedir a los integrantes del Cabildo primero a que se hiciera un receso de algunos minutos para analizar el tema a profundidad y llegar a acuerdos, y posteriormente sugirió que ese punto se retirara del orden del día y el tema se viera “el día de mañana” o en la siguiente sesión ordinaria, pues según ella “hay tiempo de sobra para gobernar”.

En respuesta, los regidores Cecilio Puc y Marciano Toledo, consideraron una falta de respeto que los dos concejales morenistas estén debatiendo un tema del cual se llegaron a acuerdos durante el precabildeo realizado el jueves por la mañana.

Al final, tanto la presidenta Lilí Campos, como la mayor parte de los integrantes del cabildo, aprobaron por mayoría la asignación de la comisión de equidad de género a Luis Allan Ochoa Medina, quién en respuesta, comenzó a alzar la voz y a ponerse impertinente, argumentando que la presidenta y el cabildo estaban cometiendo una imposición, por lo que las burlas hacia este concejal y hacia la propia Laura no se hicieron esperar.

Pero la mayor evidencia de irresponsabilidad de Laura Beristain y sus ex funcionarios se hizo presente al momento de llegar al punto del día en donde el apoderado legal de la administración saliente debía acudir a entregar el documento que aguarda la situación del ayuntamiento, y tras ser cuestionada, Laura solo fingió demencia ante el tema y para hacerse “la que no sabe”, preguntó a la presidenta Lilí y al secretario que “a quién de sus funcionarios le había avisado de que debía presentarse a entregar el documento para que ella le avisara que tenía que ir”.

Lo anterior no solo raya en la incongruencia e irresponsabilidad, sino en una grave omisión que podría repercutirle en posibles implicaciones legales tanto a ella como presidenta municipal saliente, como al ex sindico Omar Sánchez Cutis, que es el funcionario que debía haber asistido a entregar el documento que aguarda la situación del ayuntamiento en la administración 2018-2021, quién en lugar de cumplir con esta responsabilidad tal y como lo establece la Ley de los Municipios del Estado de Quintana Roo, prefirió irse a la Isla de Cozumel a asistir a la Sesión Solemne y Toma de Protesta de la Presidenta Municipal Juanita Obdulia Alonso Marrufo.

Esta grave omisión podría no ser mas que una muestra de un gran temor y nerviosismo de parte de los salientes, pues ellos están muy conscientes de todo el cochinero que dejarán a la administración ya en funciones y temen que esto no solo salga a la luz, sino que esto podría ser su pase directo a la cárcel.

Tal parece que Laura Beristain aun no se ha hecho a la idea que ya no es presidenta municipal, sino una simple regidora, pues pretende seguir haciendo y deshaciendo en el gobierno como es su costumbre, pero ahora desde su curul como concejal, aunque para ello pretenda recurrir a la desestabilización y con el apoyo de los regidores de su propio partido.

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